En Canadá y Groenlandia se matan cada año –a palos o a tiros– a unas 500.000 focas. Para obtener los capullos de hilo de seda intactos, los gusanos se hierven u hornean. Trampas con mandíbulas de acero capturan a chinchillas, zorros, coyotes, osos, nutrias, martas, zarigüeyas o castores para obtener su pelo