Como hablando consigo misma.) Es evidente que 580 en muchas cosas disiento de la mayoría de los mortales. Para mí, quien es injusto y, al mismo tiempo, de talante habilidoso en el hablar merece el mayor castigo,
[45]
pues, ufanándose de adornar la injusticia con su lengua, se atreve a cometer cualquier acción, pero 585 no es excesivamente sabio. (Dirigiéndose a Jasón.) Así también tú ahora no quieras aparecer ante mí como honorable y hábil orador, pues una sola palabra te echará por tierra.