Resulta irónico, sin duda, que la vida nos enseñe a morir bien y, en medida de lo posible, nos conduzca también a aprender a seguir viviendo tras los efectos de la muerte. Así es la vida.
tamaramoppedje citiraojučer
casi todo era basura y no había nada de valor hasta donde pude ver.
tamaramoppedje citiraojučer
Todo esto para decirte: todavía hay muchos canarios en esta mina de carbón y todas las mañanas, mientras tomo café y la luz se vierte sobre la mesa de la cocina, los oigo cantar. Están llamando, Gabo. Queda poco tiempo.
tamaramoppedje citiraojučer
Cuando las miramos, nos sumergimos en el momento del sufrimiento del otro. Nos inunda el pesimismo o la indignación.... Intentamos salir del momento de la fotografía y emerger de nuevo en nuestras vidas. Y al hacerlo, el contraste es tal que el reanudarla sin más nos parece una respuesta desesperadamente inadecuada a lo que acabamos de ver»
tamaramoppedje citiraojučer
dedicó su vida a pensar con las fotografías
tamaramoppedje citiraojučer
para Edith la agonía no significaba sufrimiento (o no sólo eso), sino más específicamente el proceso mismo (material y temporal) por medio del cual uno muere.
tamaramoppedje citiraojučer
Y siempre falla cuando más importa.
tamaramoppedje citiraojučer
llevo un registro de mi pérdida de peso desde hace un año. Lo anoto en un cuadernito. He ido bajando casi 200 gramos por semana. Estoy lentamente desvaneciéndome. Me diluyo, me disminuyo.
tamaramoppedje citiraojučer
El punto es que me desperté del sueño preguntándome de qué está hecha la voluntad de volverse a poner en pie una y otra vez. ¿Qué podemos ofrecer a nuestra alma, si no se tiene talento más que para esquivar y levantarse tras la caída?