práctica budista ofrece tres métodos para tratar el sufrimiento que proviene de semillas de sufrimientos pasados. Primero, entramos en contacto con lo que es sano, refrescante y bello en el presente; en segundo lugar, practicamos la plena conciencia para reconocer las sensaciones dolorosas en cuanto aparecen; y en tercer lugar, cuando estamos listos, invitamos a esa sensación dolorosa a manifestarse en la conciencia mental, donde podremos abrazarla con la plena conciencia y transformarla. Estos tres métodos ponen el acento en el momento presente, porque pasado y presente inter-son. El presente ya contiene el pasado. Esta es la verdad del interser.