No hace mucho tiempo, existía cerca de la frontera entre India y Bangladesh un territorio de 0,69 hectáreas único en el mundo. Este insignificante lote de tierra, perteneciente a un tal Kiri Prashad Babu 1, tenía la particularidad de ser el único contra-contraenclave que existía en el mundo: una tierra india situada en el centro de Bangladesh, que a su vez estaba en territorio indio, que se encontraba también en tierra bangladesí