Under one Roof (The STEMinist 1)

Liam examina la lista que escribí hoy, sentada entre sus muslos mientras él estaba ocupado matando a los malos en la PlayStation. Él entrecierra un poco los ojos ante mi terrible letra, y trato de no reírme

Pongo dos botellas en el carrito. Luego me pongo de puntillas y planto un beso en la boca de Liam, corto y fuerte. Liam me sigue un poco cuando doy un paso atrás, como si no quisiera dejarme ir.

—Duro y rápido, Liam.

—Duro y rápido, Liam.

—Duro y rápido, Liam.

Me gustas mucho, Mara. Me gusta hablar contigo. Me gusta verte hacer yoga. Me gusta la forma en que siempre hueles a protector solar. Me gusta cómo te las arreglas para decir casi todo lo que quieres sin dejar de ser increíblemente amable. Me gusta estar en esta casa contigo y todo lo que hacemos aquí. —Su garganta se mueve—. No creo que sea una sorpresa que realmente me guste la idea de follarte.

No tengo sexo, Mara.

— Tú… ¿Tu qué?

Mira hacia otro lado. Los dos respiramos demasiado fuerte.

—No me gusta el sexo.

Miro hacia abajo. Está tan duro. Su pene es tan pesado en mi muslo. Hay líquido pre-seminal en mi piel.

—Parece… um, parece que te gusta.

No tengo sexo, Mara.

— Tú… ¿Tu qué?

Mira hacia otro lado. Los dos respiramos demasiado fuerte.

—No me gusta el sexo.

Miro hacia abajo. Está tan duro. Su pene es tan pesado en mi muslo. Hay líquido pre-seminal en mi piel.

—Parece… um, parece que te gusta.

se me ocurre el pensamiento más molesto. Mierda.

—¡Condón! Necesitamos… ¿tú…?

Liam gime.

—Maldición.

—¿Se siente como si te estuviera dando una follada por lástima?

No. No, definitivamente no. Pero.