bookmate game
es
Books
Mónica B. Brozon,Raúl Nieto Guridi

Sombras en el arcoíris

  • Melissa Dueñazje citiraoprije 4 godine
    Cuando estoy triste y él me abraza, aunque no digamos nada, me siento mejor
  • Liliana M.je citiralaprije 4 godine
    Este libro es para todos los que creen que quienes no piensan o viven como ellos no tienen un lugar en este mundo.
  • Liliana M.je citiralaprije 4 godine
    Ése es el problema con las personas que creen saberlo todo, que la mayoría de las veces hablan más bien sin saber na-da.
  • Liliana M.je citiralaprije 4 godine
    No es que me crea la sabelotodo, pero la verdad ya sabía que mis papás no iban a dejar de querer a Jero, ni lo iban a correr de la casa, ni lo iban a mandar con un doctor que hiciera que le gusten las chicas.
  • Liliana M.je citiralaprije 4 godine
    Yo no entendía muy bien, porque aunque me parecen padres sus canciones, Lady Gaga no es una superheroína. Lo que sí entendía es que él era diferente.
  • karinaramone1prije 4 godine
    A Jero le gusta toda la música, pero cuando está triste escucha música clásica porque dice que le pone más drama al drama.
  • karinaramone1prije 4 godine
    Ése es el problema con las personas que creen saberlo todo, que la mayoría de las veces hablan más bien sin saber na-da.
  • karinaramone1prije 4 godine
    Este libro es para todos los que creen que quienes no piensan o viven como ellos no tienen un lugar en este mundo.
  • Parásitosje citiraoprije 4 godine
    —¡Qué padre pulsera, oye! —me dice Vane.

    —Yo la hice.

    —Ay, sí… ¿Neta?

    —Neta. Y le hice una a Jero. Es que teníamos un pacto secreto. Ya no lo es, pero igual. Era un poco más serio y más secreto que nuestro pacto de los sándwiches, pero haz de cuenta algo así.

    —Hazme una igual, ¿no?

    —Ésa es la cosa, no te puedo hacer una igual si no tienes un hermano que sea gay. O un muuuy amigo, o así —nunca le había dicho esto a nadie, y menos en voz alta. Pero ahora ya no es un secreto y, como dijo mi hermano: si los saben mis papás, que lo sepa el mundo.

    —Chale, qué mala onda —es lo único que me contesta.

    —¿Que mala onda qué?

    —Pues que no tengo un hermano ni un mejor amigo gay. Me gusta mucho, en serio, ¡está padrísima!

    Me quedo esperando alguna otra reacción. Alguna pregunta. Pero Vane sólo sigue comiendo su sándwich sin despegar los ojos de mi pulsera.

    —Igual me la puedes hacer de otros colores, ¿no? ¿O tampoco?

    —Ah, pues sí, eso sí.

    Nos quedamos calladas un rato comiendo nuestros sándwiches, hasta que Vane me pregunta:

    —Bueno y, total, ¿cuál era el secreto que ya no es secreto?

    —¡Pues ése, que Jero es gay!

    —Aaah, órale. A ver, déjame probarme tu pulsera.
  • Carlos. J. B.je citiraoprije 4 godine
    La verdad, no entiendo. No entiendo por qué los papás de Oscar prefieren tenerlo lejos y triste, que cerca y feliz. No entiendo por qué algunos piensan que enamorarse de alguien hace mala a una persona. “Abominable”, como dijo Anamari. Yo digo que, para el caso, es más abominable andar golpeando e insultando a la gente. O molestando nada más, como Anamari y Sofía, que ya no me volvieron a decir nada, pero siguen con sus miraditas y cuchicheos gachos
fb2epub
Povucite i ispustite datoteke (ne više od 5 odjednom)