Una gran historia de amor muchas veces deviene en mito. La de Amelia Francisca de Sales Adelaida Ramona Goyre de la Hoz y Vicente Adot Rabell se convirtió, tras la muerte de su hijo y ella, en uno de los más seguidos dentro de nuestra tradición: el mito de La Milagrosa. En palabras de Julio A. Martí, “el amor delirante de aquel hombre por su mujer es el asunto de este libro”, recreación policiaca, en la que el duelo a muerte es cumbre dramática. Resultado de una acuciosa investigación histórica, puede leerse como un fresco de los últimos años del siglo XIX y los primeros del XX. Complejos personajes, cuidada disposición del tiempo y el espacio y recursos narrativos que, por momentos, recuerdan la obra de Gabriel García Márquez, convierten a Demonios de la pasión en apasionante ejemplar de la literatura cubana actual.