En un mundo en el que una empresa de teléfonos celulares ejerce una tiranía difusa, en el que en casi todas las casas hay celdas y casi todos los vecinos son carceleros, en el que el principal entretenimiento son las luchas entre presos y animales, en el que pasan muchas cosas en los sótanos, en el que las mujeres están, o son, peladas, cuatro historias: una carcelera, que se ha enamorado de su preso, tiene que ingeniárselas para salvarlo de la puntería de su esposa; un luchador invicto se enfrenta a una prueba que nadie ha superado todavía; un científico que se dedica a reducir cabezas trata de adiestrar a una nena que sólo come carne humana; una muñeca que un chico tira en un baldío desencadena una serie de prodigios y metamorfosis.
Julián Aubrit