Ambrosio salió adelante en muy poco tiempo, creció robusto y se puso hermoso y gordo. Pero, ay, quiso Dios que cada criatura poseyera su propio olor, y el olor que es natural a los cerdos no es precisamente agradable.
Fernando Bravoje citiraoprije 3 godine
Ya se sabe que los niños y los cerditos tienen las mismas costumbres, y ten en cuenta el extraordinario parecido que hay entre la piel de unos y de otros.
Fernando Bravoje citiraoprije 3 godine
Ambrosio era hijo de Sorcha. Sorcha era nuestra cerda,
Fernando Bravoje citiraoprije 3 godine
mi madre había puesto una olla grande como un barril con patatas para los cerdos;