Las correcciones

Si el Aslan evita que se pierda usted, por culpa de la distimia subclínica, una sola de las actividades de las Pleasurelines que tiene pagadas de antemano, ya saldrá usted ganando.

No sabía nada de antigüedades ni de arquitectura, no pintaba como Sylvia, no leía como Ted, le interesaban muy pocas cosas y muy pocas cosas había experimentado. Lo único verdadero que alguna vez había tenido era la capacidad de amar.

despertarse en el sillón azul, de buen tamaño, en que llevaba durmiendo desde de