El anticristo fue escrita por Juan Ruiz de Alarcón entre 1623 y 1625. Durante su estreno ocurrió un incidente relatado por Luis de Góngora a Hortensio Félix Paravicino: «La comedia, digo El anticristo, de don Juan de Alarcón, se estrenó el miércoles pasado. Echáronselo a perder aquel día con cierta redomilla que enterraron en medio del patio, de olor tan infernal, que desmayó a muchos de los que no pudieron salir aprisa. Este suceso aconteció cuando el actor que representaba al ángel se negó a volar y fue sustituido por una de las actrices».
El incidente fue aprovechado por el mismo Góngora para burlarse de Ruiz de Alarcón en uno de sus sonetos y Lope de Vega fue encarcelado porque se le acusó de colocar la redoma. El anticristo relata la historia del Anticristo, villano por excelencia del teatro alarconiano. Este descendiente de Judas Iscariote, comete horrendos crímenes castigados al final por tres personajes: un ángel; Sofía, encarnación de lo humano; y Balán, símbolo de la naturaleza.